"Puesto nombre y tan a su gusto a su caballo, quiso ponérsele a sí mismo, y en este pensamiento, duró otros ocho días, y al cabo se vino a llamar DON QUIJOTE,..." (El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de La Mancha - Cap. I.)
Es lo que tiene utilizar un "nombre de guerra", que las propias hazañas lo hacen tan popular que viene a enterrar en el olvido al nombre propio. Un "alias", un "seudónimo", un "mote", un "apodo", y pasados cuatrocientos años ya nadie recordará tu verdadero nombre... Por eso yo me estoy pensando en eliminar a "almena" y postear con mi nombre y apellidos. Tengo miedo de que dentro de cuatrocientos años nadie recuerde ya cómo me nombraron a la vera de la pila bautismal... :-))
La culpa la ha tenido una encuesta, que ha venido a descubrir que, entre el universo encuestado y como respuesta a la pregunta: "¿Qué sabe vd. de Alonso Quijano?"
Las respuestas fueron:
-El 78% creían que era el grupo musical "Quijano" (Café Quijano), o el nombre de alguno de sus componentes.
-El 17% decían que era un escritor de hace siglos.
-El 3%, opinaban que era un político.
-El 2%, no sabían nada de este nombre, aunque "les sonaba".
Ignoro las características de la muestra elegida, pero si tú también te has quedado "con los ojos a cuadros" ante semejantes porcentajes, si por casualidad la duda está mermando tu fe, pincha en esta imagen del hijodalgo y él te llevará a la noticia.
Mientras, Don Quijote, animado en una nueva aventura, se lanza al mundo de los blogs y "postea" en el suyo propio. Sancho le emula, desde luego que sí. He aquí sus bitácoras:
No hay comentarios:
Publicar un comentario